First Week of Advent
Open doors, make room
Psalm 24:7
Lift up your heads, O gates! and be lifted up, O ancient doors! that the King of glory may come in.
December is a nostalgic month for me. It brings back memories of the watershed day — December 29, 1969 — when my family left Cuba as exiles, not sure if we would ever return. We carried one shared suitcase, along with empty pockets and big dreams.
Upon landing in Madrid, we were to meet a friend who had money from our relatives in the United States and instructions to welcome us. But our host was out of town, so we were greeted instead by two acquaintances that my father recognized in the crowd. They opened their homes to us. As we begin the Advent season, I’m mindful of all the displaced people who long for a warm welcome.
How can you open your heart, home and church to strangers this Advent season?
God of Advent, remind us that you still come to us anew in unexpected ways and people. Amen.
Primera semana de Adviento
Abre las puertas, haz lugar
Salmo 24:7
¡Ustedes, puertas, levanten sus dinteles! ¡Ensánchense ustedes, puertas eternas! ¡Ábranle paso al Rey de la gloria!
Diciembre es un mes nostálgico para mí. Me trae memorias del día decisivo — 29 de diciembre de 1969 — cuando mi familia salió de Cuba en calidad de exiliada, sin saber si algún día volveríamos. Llevábamos una maleta compartida, junto con los bolsillos vacíos y grandes sueños.
Al aterrizar en Madrid debíamos encontrarnos con un amigo que tenía dinero de parte de nuestros familiares en Estados Unidos e instrucciones para recibirnos. Pero nuestro anfitrión estaba fuera de la ciudad, así que nos recibieron a cambio dos conocidos que mi padre vio entre la multitud. Ellos nos abrieron sus hogares. Al comenzar la estación de Adviento, recuerdo a toda la gente desplazada que anhela recibir una cálida bienvenida.
¿Cómo puedes abrir tu corazón, tu hogar y tu iglesia a gente desconocida este Adviento?
Dios del Adviento, recuérdanos que tú todavía nos llegas en maneras y gente inesperadas. Amén